Cuando hicimos el viaje a la Laponia finlandesa era nuestra segunda vez en el país. La primera vez que lo visitamos empezamos en Helsinki y recorrimos en coche la parte sur y la parte central hasta llegar a donde empieza el círculo polar ártico (es decir, Laponia). Nos gustó tanto la experiencia que nos prometimos volver, y al invierno siguiente tuvo lugar el viaje que aquí os voy a contar a continuación.
Finlandia es un país que nos encanta. Es seguro, tranquilo y lleno de naturaleza desbordante: los ingredientes para un viaje perfecto. Las dos veces que lo visitamos lo hicimos en invierno, concretamente entre febrero y marzo, porque queríamos vivir la experiencia invernal finlandesa. Pero otro de nuestros objetivos es volver en verano y ver qué ofrece el país en una estación totalmente diferente.
Sin más dilación, en este artículo os contamos con todo detalle cómo fue nuestro viaje a la Laponia finlandesa, que tuvo lugar del 24 de febrero al 7 de marzo y que realizamos enteramente por libre y en coche. Os contaremos qué visitar en cada punto, cómo organizar todas las visitas día por día, cuáles son las mejores saunas, consejos sobre alojamientos, dónde probar los platos típicos y actividades que no pueden faltar. Esperamos que esta guía de viaje por el norte de Finlandia os sirva de ayuda para planear vuestra aventura.
Un pequeño acercamiento a Laponia 🗺️
Laponia es una zona geográfica, pero no solo la encontramos en Finlandia. Concretamente, es una zona localizada en el norte de Europa y que abarca los territorios habitados por los pueblos sami (la única tribu que existe hasta el día de hoy en el viejo continente). Por tanto, es un área que ocupa el norte de cuatro países: Noruega, Suecia, Finlandia y una pequeña parte de Rusia.
En el caso de Finlandia, la ciudad principal y capital de Laponia es la famosa Rovaniemi, lugar en el que empezó nuestro viaje por el norte y donde también te aconsejo empezar el tuyo. En la siguiente imagen, puedes ver en color azul toda la zona del norte de Europa que abarca Laponia.

En otros mapas de Finlandia, como el que ofrece Google Maps y que podemos ver aquí abajo, la región considerada Laponia es un poco más extensa, abarcando la totalidad del norte del país. Esto se debe a que hay que diferenciar entre la región administrativa y la región cultural. Administrativamente, el gobierno de Finlandia indica que Laponia abarca la zona que podemos ver en tono rojizo en la siguiente imagen. Pero si nos guiamos únicamente por la zona en la que tradicionalmente vive el pueblo sami, Laponia es estrictamente la región que ocupa el color azul en la imagen superior.
Ahora que ya sabes más sobre Laponia geográficamente hablando, es el momento de pasar a hablar sobre el viaje al norte de Finlandia.
Cosas a tener en cuenta en tu viaje por libre a la Laponia finlandesa: consejos y recomendaciones 🧤
Alquiler de coche
Si definitivamente quieres hacer el viaje a Laponia por libre, lo ideal es alquilar un coche para llegar a cualquier punto sin problema. En ese sentido, nosotros os recomendamos que lo reservéis con tiempo para no quedaros sin vehículo y para conseguirlo por un mejor precio.
Finlandia es un país caro, y más si hablamos del norte, por lo que el coste de los alquileres es bastante elevado. Las compañías de alquiler más famosas ofrecen unos precios desorbitados, pero nosotros encontramos una empresa local que tenía mucho mejor precio llamada FinnRent. Aunque los precios siguen siendo más altos en comparación con otros países, ellos tenían las tarifas más baratas por días que encontramos. Por todo eso, os aconsejamos que alquiléis con ellos.
Nuestra experiencia con Finn Rent fue muy buena y no tuvimos ningún problema. Además, tienen oficina en el aeropuerto de Rovaniemi y no tienes que desplazarte una vez aterrizas. Ellos mismos te llevan el coche hasta el parking de allí y, al finalizar, tú también lo puedes devolver al mismo sitio. ¡Fácil!

Ropa de abrigo
La ropa de nieve puede llegar a ser muy cara, incluso si solo hablamos del equipamiento básico. En este caso, nosotros compramos todas las prendas en Decathlon, una gran decisión. La marca tiene precios muy buenos y la calidad es bastante alta. De hecho, la ropa que llevamos al segundo viaje a Laponia fue la misma que utilizamos la primera vez que visitamos el país, prueba de que también es duradera. Os animamos a que os acerquéis a sus instalaciones y preguntéis si tenéis cualquier duda al staff.
Como consejos de vestimenta para visitar Finlandia en invierno, no pueden faltar unas botas de invierno y un buen abrigo exterior con capucha preparado para temperaturas bajo cero. Luego, es fundamental seguir la técnica de las capas en la parte de arriba. Nosotros llevamos una camiseta interior y un polar encima; eso junto con el abrigo exterior era suficiente en la zona superior del cuerpo. También es muy importante que los pantalones sean de invierno, si es así no necesitarás ponerte unos leggins debajo. Además, yo me cogí unos pantalones específicos para hacer «snow« y no me arrepiento porque son muy calentitos y evitan que te entre nieve por la parte de abajo.
Complementos indispensables
Si me preguntaran qué complemento es indispensable para viajar a Finlandia en invierno, sin duda diría que los crampones. Sin ellos, hay zonas de muchísimos parques naturales a las que no podrás acceder, no porque esté prohibido, sino porque te será físicamente imposible caminar debido al hielo resbaladizo.
Eso sí, te aconsejo que compres unos que tengan unos buenos pinchos para que se claven bien en el terreno, no los típicos con pequeños círculos con puntos que parecen botones (cuando los veas sabrás de qué hablo). En este caso, te recomiendo que optes más por Amazon y que te guíes por los comentarios de los compradores. Por supuesto, tampoco pueden faltar unos buenos guantes, gorro de nieve y calcetines bien calentitos.
Viaje de 15 días por la Laponia Finlandesa: guía paso a paso 🇫🇮
Nuestro viaje por el norte de Finlandia empezó en Rovaniemi y terminó en la misma ciudad, ya que diseñamos un itinerario circular para optimizar la gasolina y el tiempo. Esperamos que todo el contenido te sea útil y os animamos a dejarnos cualquier duda u observación en el apartado de comentarios, estaremos encantados de leeros. ¡Vamos allá!
*Os hemos dejado enlace a Google Maps de todos los sitios que os recomendamos visitar para que los podáis localizar rápidamente en el mapa y guardarlos en vuestras carpetas.
Día 1: viaje a Laponia en avión
Nuestro primer día de viaje lo pasamos entre aeropuertos. El recorrido fue Madrid-Helsinki-Rovaniemi, llegando por la noche al destino. Solo nos dio tiempo a recoger el coche y a dirigirnos a nuestro primer alojamiento, el cual encontramos a través de la plataforma Airbnb, como todos los de este viaje. Nos decantamos por «Reno Pekka’s Apartment», que está a 40 minutos en coche de Rovaniemi.

Por tiempo y practicidad, lo ideal habría sido alquilar uno en la propia ciudad, pero estaban bastante elevados de precio y, además, yendo con coche es muy importante que disponga de parking gratuito (algo en lo que debéis fijaros muy bien a la hora de alquilar un hotel o apartamento si viajáis con este vehículo).
Por otro lado, algo fundamental para nosotros es que el anfitrión ofrezca un proceso de llegada autónoma para que podamos hacer el check-in a la hora que nosotros deseemos. De esta forma, no nos tenemos que comprometer a quedar a una hora exacta y no hay problemas de retrasos o a la hora de encajar horarios. En estos casos, se suelen colocar las llaves en una caja de seguridad y el anfitrión envía la clave un día u horas antes del check-in.
Día 2: el día en Rovaniemi
Lo primero que hicimos al levantarnos fue coger el coche y dirigirnos a desayunar a un café que habíamos localizado a través de Google Maps, no sin antes echar un vistazo a la zona trasera del apartamento, que tiene unas preciosas vistas nevadas. El café se llama «Coffee House Rovaniemi» y está en la zona de tiendas de la ciudad, lo que se considera el centro. Os lo recomendamos mucho, el café está muy bueno y tienen una gran variedad de bollería y acompañamientos salados. Otra alternativa es «Espresso House Sampokeskus», que probamos al día siguiente y el cual nos gustó más.
Como opción de aparcamiento, de nuestro primer viaje a Finlandia (en el cual estuvimos un día en Rovaniemi) aprendimos que el museo Arktikum ofrece parking gratuito en sus instalaciones, por lo que dejamos allí el coche. Os aconsejo que hagáis lo mismo. Y, por supuesto, el Arktikum es un lugar que, sin duda, merece una visita, por lo que también podéis incluirlo en vuestro itinerario del día si queréis. Nosotros ya lo visitamos en nuestro primer viaje y nos encantó. Aprenderéis mucho sobre la historia de Finlandia y os ayudará a calentar motores para meteros más en el viaje, siendo una muy buena idea incluirlo como visita al principio del recorrido.

Nosotros, como os he contado, ya lo habíamos visitado, así que optamos por acercarnos a la zona natural de Ounasvaara para recorrer un pequeño sendero que lleva a una torre de observación, desde la que se tienen unas vistas muy bonitas de la ciudad de Rovaniemi. El parque está muy cerca de la ciudad, así que no tendréis que caminar mucho hasta llegar hasta él. Además, la ruta también es bastante cortita y accesible, llamada «Ounasvaara Winter Trail».
Al finalizar, fuimos con el coche a comer a nuestro restaurante favorito de toda Finlandia y que descubrimos durante nuestro primer viaje por el país: Santa’s Salmon Place, donde hacen el mejor salmón a la parrilla que hemos probado. Se encuentra en la Aldea de Papá Noel, así que podéis aprovechar para visitarla después de comer. Es un sitio muy turístico donde hay muchísimas tiendas con productos navideños, pero es un imprescindible y no os la podéis perder. Es interesante para comparar souvenirs y algún producto típico del país. Nosotros, por ejemplo, aprovechamos para comprar paté de reno. Y, por supuesto, se puede visitar a Santa.

Terminamos el día visitando una sauna, una de las cosas que más nos encanta hacer en el país. Se llama WNTR Sauna y solo dispone de una, la cual funciona con leña. La idea es ir saliendo y entrando; incluso si os atrevéis podéis bañaros en el Río Kemi entre sesión y sesión de sauna. Visitamos muchas saunas durante este viaje y esta la situamos en el puesto número 2 del ranking. Nos encantó.
Día 3: dos opciones de actividades para tu viaje a Laponia
En este caso os proponemos dos opciones:
- Visitar el museo Artktikum y/o la Aldea de Papá Noel si no os dio tiempo el día anterior.
- Ir a la zona de senderismo Arctic Circle.
Nosotros optamos por esta última opción, pues ya conocíamos los dos sitios anteriores. Sin embargo, no es un punto muy destacable del viaje (ya que hay mejores parques naturales), por lo que os damos la opción de elegir si visitarlo o aprovechar para conocer más Rovaniemi.
Lo más bonito de esta zona de senderismo es el puente que se encuentra al principio del recorrido y, por supuesto, el restaurante que hay en el Resort de la zona, donde probamos el mejor reno salteado (poronkäristys), un plato típicos finlandés que consiste en puré de patata acompañado de trocitos de reno y de grosellas.

De nuevo, terminamos nuestro día en una sauna, en este caso la de Apukka Resort. Reservamos la que ofrecía una sesión privada con jacuzzi, así que si os apetece vivir una experiencia más íntima, es el plan perfecto.
Día 4: trekking por el cañón de Korouoma, uno de los imprescindibles del viaje a Laponia
El cuarto día lo dedicamos en exclusiva a recorrer un parque natural que aloja unas cascadas heladas impresionantes. Está a 1 hora y 24 minutos de Rovaniemi en coche, por lo que aprovechamos también para cambiar de alojamiento al finalizar la ruta de senderismo por la reserva.
La Reserva Natural de Korouoma se acabó convirtiendo en nuestro trekking favorito del viaje. En específico, hicimos la ruta circular de 5km que, aunque no es difícil, tiene muchas subidas y bajadas. Korouoma es el claro ejemplo de la importancia de los crampones durante el viaje. Vimos a muchas personas sin ellos que lo pasaban realmente mal, yo no sé ni cómo podían avanzar.

Tuvimos la gran suerte de poder ver a algunos escaladores subiendo por las cascadas heladas, algo muy impresionante que nunca habíamos visto. Hay por lo menos siete cascadas en el entorno de Korouoma y muchas las podréis ver si hacéis el recorrido circular del que os hablamos. Tenéis la opción de hacerlo por libre, pero también hay muchas excursiones por Korouoma donde podréis vivir la experiencia acompañado de un guía experto que os explicará curiosidades de la zona.

Este día lo terminamos yendo a nuestro nuevo apartamento, llamado «Apartamento Tinttis», en la ciudad de Kuusamo. Fue nuestra base durante los días que dedicamos a recorrer la zona. Lo que más nos gustó fue que es espacioso y que todo estaba muy limpio.
Día 5: Riisitunturi National Park
Está claro que si decides viajar a Finlandia tiene que gustarte la naturaleza porque es uno de los grandes tesoros del país y una de las principales actividades que se pueden realizar allí. Este día lo dedicamos a recorrer el Parque Natural de Riisitunturi, donde hicimos la ruta circular de 4,3 km que se llama Riisin Räpääsi.
Es una parque también espectacular, donde puedes vivir dos experiencias según la meteorología del día:
- Si está muy nublado (lo que nos ocurrió a nosotros) el recorrido será muy especial porque todo tendrá un aura mística debido a la niebla. Sin embargo, al llegar al mirador, no podrás ver las espectaculares vistas del parque.
- Si no está nublado podréis disfrutar de las vistas de la zona y recorrer el camino viendo durante todo el rato todos los árboles llenos de nieve.
Por supuesto, también podéis recorrer el Parque Natural de Riisitunturi con guía o por libre. Elegid según vuestra preparación y el tipo de experiencia que prefiráis vivir.

Día 6: rápidos de Myllykoski y Jyrävä
En este caso, también os vamos a recomendar un lugar para desayunar que nos encantó y que tiene muy buenos precios. Estaba muy cerca en coche desde nuestro apartamento en Kuusamo y nos pillaba de camino para la siguiente actividad. Es la cafetería Herkku y las mujeres que lo llevan son encantadoras, además de tener una sección de souvenirs con precios también muy competitivos.

Cuando terminamos, pusimos rumbo a los rápidos. El primero de ellos, los rápidos de Myllykoski, tienen el particular encanto de albergar un precioso puente con una casita al lado, lo que le da a la zona un ambiente de cuento. Podrás hacer maravillosas fotos en el entorno y disfrutar la zona pasando por el puente. Luego, para dirigirte a Jyrävä tendrás que caminar un poco más por el sendero hasta llegar a una casita de descanso desde la que se tienen unas vistas preciosas del río helado. No te preocupes porque los caminos están muy bien señalizados.

Día 7: zona de esquí de Ruka
Ruka es una de las estaciones de esquí que tiene Finlandia. Nosotros no sabemos esquiar, así que la tenemos que disfrutar de otra forma, como por ejemplo dentro de una sauna. Dicen que en Finlandia hay más saunas que personas, y aunque ese dato no es realmente cierto, es el país que la creó y sus habitantes la integran de forma natural en su día a día. Tanto es así que en la estación de esquí puedes llegar a una utilizando un teleférico, ya que se encuentra arriba de la montaña. La sauna en cuestión se llama BASE y lo más destacable de ella son las vistas que se tiene desde sus instalaciones.
Al finalizar nuestra sesión de sauna fuimos a cenar una rica pizza en Pizzería Ruka, donde las hacen deliciosas y se nota la gran calidad de los ingredientes. Os recomiendo reservar porque se suele llenar bastante. Luego, nos dirigimos al que sería nuestro apartamento favorito del viaje. Se llama «Luppola – Cabin in Saariselkä» y está en Airbnb. No he podido dar con el enlace, pero os animo a que pongáis el nombre en la plataforma para echarle un ojo. Además de estar equipado con sauna, hay espacio para cuatro personas, por lo que puede salir bastante económico si vais en grupo, siendo además ideal para familias.

Día 8: un completo día en Saariselkä
En esta zona empieza la parte del viaje donde estuvimos más al norte. Pero, primero, vayamos a lo más importante al empezar el día: el desayuno. En este punto del viaje dimos con el que se convertiría en nuestra cafetería favorita del viaje por Laponia. En Google la podréis encontrar por le nombre de «Laanilan Savottakahvila» y todo está riquísimo. Digamos que no es barato, pero merece mucho la pena.
Además, tiene un encanto especial porque es un sitio de paso al que muchos finlandeses van para hacer una parada en el camino durante sus rutas con esquís por la zona, por lo que veréis un gran trasiego de personas con monos de invierno tomando un refrigerio y dejando su equipamiento en los «parkings para esquís». Parece una tontería, pero son este tipo de cosas tan curiosas las que le dan a los viajes ese toque único tan difícil de encontrar a veces en un mundo cada vez más globalizado.
Después, el día lo dedicamos a subir en coche al pico de montaña Kaunispää para ver la zona desde las alturas en la torre de avistamiento. Como es una zona muy elevada, se nota cómo bajan las temperaturas y el frío se hace más difícil de soportar, pero merece absolutamente la pena por ver la estepa helada.

Luego, el plan era visitar otra sauna, esta vez un tanto particular. Se trata de la sauna de humo Kiilopää, un uso tradicional de esta práctica que tiene su origen en Estonia y que incluso se considera Patrimonio Inmaterial de la Humanidad por la UNESCO. A diferencia de otras formas de uso de la sauna, para la smoke sauna se llena la estancia de humo durante el calentamiento y, una vez se ha ventilado, es cuando se puede empezar a utilizar. Personalmente, no es nuestro estilo favorito, pero sin duda es algo que recomendamos probar al menos una vez en la vida. El calor dentro de la caseta es más suave y, además, debes utilizar una especie de tabla antes de sentarte en los asientos para no mancharte con el humo. Por supuesto, también tendrás zonas en las que sumergirte en el agua en plena naturaleza para notar el contraste de temperatura.

Por último, cuando cayó la noche, llegó nuestro primer intento de ver auroras boreales en el viaje a Laponia. Durante nuestra primera visita al país también lo intentamos, al igual que cuando fuimos de viaje a Islandia, pero nunca habíamos terminado de verlas en todo su esplendor. Para ello, nos adentramos en el Parque Natural Urho Kekossen, en la entrada que hay en Saariselkä, dirección a la cabaña y lugar de avistamiento llamado Aurora Day Hut. En esta ocasión, no tuvimos éxito, aunque sí que pudimos comprobar que es un lugar muy famoso para hacer avistamiento, ya que estaba lleno de gente. Sin embargo, nuestro día de ver Auroras tendría que esperar.
Nosotros preferimos buscar auroras boreales por nuestra cuenta, pero en el país hay muchas actividades de búsqueda de auroras donde, en compañía de expertos, te adentras en la noche en busca de estas maravillas de la naturaleza. Si no te apetece estar buscando por tu cuenta, ya que puedes correr el riesgo de no encontrar ninguna o de no saber dónde hacerlo, es una opción interesante. Hay incluso tours en quad para ver auroras boreales.
Día 9: visita a Inari
Nuestro objetivo este día era dirigirnos más al norte para adentrarnos en la zona de Inari y poder visitar el museo SIIDA, el cual cuenta toda la historia de los Sami. Aunque personalmente nos gustó más el museo Arktikum, en este también aprendimos mucho y, sin duda, os lo recomendamos. Además, un parte del museo está al aire libre, y aunque en verano tiene más vida y entiendo que la equipan con todo lo necesario para que sea informativo, en invierno también dejan pasar y puedes ver algunas casetas.
Finalizamos el día comiendo una hamburguesa de reno riquísima en ScanBurger, un sitio justo al lado de una gasolinera que en principio no nos dio muy buenas sensaciones por la ubicación, pero que sin duda debes probar. Eso sí, únicamente podemos opinar sobre el plato que nosotros pedimos y, sinceramente, creo que era su hamburguesa estrella.
Día 10: un día para disfrutar como niños
Hasta este punto del viaje, todos los sitios a visitar los teníamos planeados de antemano. Pero cuando Álex (la otra mitad de La Ruta Oculta) vio que en la estación de esquí de Saariselkä te podías tirar en trineo, la historia ya se escribió sola. Ni recuerdo cuál era el plan inicial para ese día, pero no me arrepiento en absoluto del cambio porque el día 10 se convirtió en el más divertido de todo el viaje.
Y es que, en Saariselkä se encuentra el tobogán de nieve más largo de Europa, y el sitio perfecto para todos aquellos que no sabemos hacer ni esquí ni snow. Consiste en deslizarte sentado en trineo de plástico desde lo alto de la montaña hasta su base. A mí siempre me dan un poco de respeto estas cosas, pero me acabo animando, ¡y menos mal! Sin embargo, también os diré que no hay que subestimar la actividad, aunque la hacen también niños, se pueden alcanzar grandes velocidades y hay que tener en cuenta tanto a las personas que se tiran antes que tú como a las que se tiran después.

En Saariselkä Sky Shop podréis alquilar toda la equipación por alrededor de 60€/persona y os aconsejo que también alquiléis las gafas porque os hará el viaje mucho más cómodo y evitará que se os meta la nieve en los ojos durante las bajadas. A nosotros nos dio tiempo a tirarnos 5 veces (ya que el alquiler es durante un tiempo determinado, creo recordar que alrededor de dos horas) y nos quedamos satisfechos. El precio también incluye todas las subidas en teleférico a la cima y una bebida caliente en la cafetería de al lado de la tienda (el chocolate con leche está buenísimo).
Poco más os puedo decir, solo que disfrutéis. La mecánica es muy sencilla, para frenar solo tenéis que clavar los talones en la nieve y, para girar, clavar en la nieve el talón que se encuentre en la dirección hacia donde queráis virar. ¡La verdad que la experiencia fue una pasada! Y si queréis también podéis probar y buscar auroras boreales en Saarselkä en grupo o en solitario, es un muy buen sitio ya que está bastante al norte.
Día 11: un día tranquilo después de la emoción
Tras el día 10 lleno de adrenalina, decidimos tomarnos el día 11 con más relax y visitar el conocido como Museo del Oro de Tankavaara, donde narran la fiebre del oro que hubo en Finlandia y hacen un recorrido por la historia de la búsqueda del oro en diferentes países. Es un museo muy interesante, y aunque nunca te hayas interesado por el tema, te aseguro que te va a resultar curioso. Como no os llevará mucho tiempo, también podéis acercaros a la cafetería del pueblo y visitar a los renos que se encuentran allí, son adorables.

Por último, de vuelta a Saariselkä, comimos en un restaurante que también nos gustó mucho, Ravintola Teerenpesä. Os recomendamos aprovechar y probar otro de los platos típicos del país, la sopa de salmón (lohikeitto). Y si os apetece algo más familiar, el risotto también lo preparan muy bien. Además, si no habéis tenido oportunidad todavía de probar el reno salteado con puré, este también es un buen lugar para comerlo. Eso sí, no os recomendamos pedir postre, porque además de caro son excesivamente pequeños.
Día 12: el día soñado
Aunque a priori este día parecía ser uno más e, incluso, un poco pesador porque tocaba moverse del este al oeste, la noche nos tenía preparado un regalo. Pero empecemos por el principio. La idea era viajar desde Saariselkä a la zona de Yllastunturi, lo cual está como a tres horas de camino. Pero antes de llegar a nuestro nuevo alojamiento hicimos una parada en el Lapland Hotel Snow Village, no porque hubiéramos cambiado de idea sobre dónde dormir, sino porque además de hotel, este complejo aloja toda una obra de arte hecha enteramente con hielo.
Se trata del museo de esculturas de hielo que cada año construyen desde cero durante el invierno. El año en el que nosotros fuimos la temática era el fondo del mar, por lo que todas las esculturas de hielo eran de animales o plantas marinas, pero cambia cada año. Además de espectacular, lo especial de esta construcción es que en verano, como es obvio, se deshace, por lo que cada invierno se puede ver algo totalmente nuevo y único.

Pero, aunque fue espectacular y 100% recomendable, este no fue el regalo que nos deparaba el día. Y es que, cuando llegamos a nuestro alojamiento ya por la noche, vimos que la aplicación de auroras boreales que utilizamos durante el viaje y que sirve para analizar la probabilidad diaria de ver las luces del norte (My Aurora Forecast) nos indicaba que la actividad era alta. Así que era nuestro momento.
Después de intentarlo en varios puntos sin éxito, decidí buscar en Google cuál era el mejor lugar de la zona para ver Auroras. Solo encontré información en inglés y me di cuenta de que se mencionaba mucho el lago Ylläsjärvi, que casualmente teníamos justo al lado del apartamento. Así que para allá nos dirigimos. Fuimos en coche y nos metimos por el camino que lleva a la cafetería Milu. Dejamos el vehículo aparcado y en cuanto vimos a un par de personas adentrarse hacia el lago por un camino, las seguimos. Acabamos en medio del lago helado mirando al cielo y esperando el espectáculo, el cual no tardó en llegar.
Antes de ese día, por nuestra mala experiencia viendo auroras (las cuales habían sido muy leves y débiles), pensábamos que la gente exageraba contando su experiencia viendo las northern lights, pero después del día 12 nosotros nos convertimos en esas personas que cuentan maravillas de la experiencia. Es un espectáculo alucinante en el que, si tienes suerte y das con un día de mucha actividad solar, no paras de ver colores en el cielo en medio de la noche, como ríos de colores bailando en la oscuridad. Solo os deseo para este viaje por Laponia que tengáis la oportunidad de experimentarlo por vosotros mismos.
Día 13: la actividad de trineo con huskies
Si haces un viaje a Laponia en invierno, personalmente creo que no puede faltar esta actividad en tu planning. Es algo muy especial y único que no se puede hacer en cualquier sitio, y te aseguro que te enamorarás. Es cierto que es una experiencia cara, pero si puedes creo que merece la pena destinar parte del presupuesto a esto en vez de a otras actividades.

La experiencia de trineo con huskies se hace por parejas (aunque también se puede hacer en solitario) y consiste en ser empujado por un grupo de perros huskies por la nieve. Normalmente, un miembro de la pareja se sienta en el trineo mientras el otro dirige a los perros de pie en la zona trasera del trineo para, luego, cambiar el rol a mitad de camino y que, así, ambos podáis experimentar ambas sensaciones. Los perros son un encanto y, afortunadamente, en las dos ocasiones en las que hemos probado esta actividad (la otra fue la primera vez que visitamos el país) hemos dado con muy buenas empresas que se nota que cuidan a sus animales.
En esta ocasiones, nos decantamos por la granja Hetta Huskies, situada en Henontekiö. En su web puedes elegir la duración que quieres que tenga el recorrido, habiendo incluso excursiones de varios días. A nosotros nos habría encantado vivirlo, pero es cierto que requieren un gran desembolso, así que elegimos la que duraba alrededor de dos horas llamada «Lagos congelados» y que tiene un precio de 160€/persona. Te aseguro que el tiempo se pasa rapidísimo y que te divertirás muchísimo con los perritos.

La organización, además, te deja tiempo para que interactúes con ellos en las paradas. A los perros les encanta correr y están ansiosos siempre por empezar el camino. Tienen mucha energía y disfrutan como locos del recorrido. Antes de empezar, te darán una charla (en inglés) para que sepas manejar el trineo y tengas en cuenta diferentes aspectos de la seguridad. Aunque es todo bastante fácil, hay que estar atento para que todo salga lo mejor posible. Cerca de Rovaniemi, en la Aldea de Papá Noel, también hay actividades de trineo con Huskies, puede ser una buena opción si no queréis desplazaros tanto en coche a granjas como esta.
Día 14: la mejor sauna para terminar el camino
Este fue nuestro último día por el país y teníamos guardado un as en la manga para poner el broche final a un viaje maravilloso. Pero como lo primero es lo primero, os recomendaremos otro sitio para desayunar y empezar bien el día que tiene mucho encanto. Se llama Karilan Navettagalleria y hay bollitos y café muy ricos.
Cuando ya llenamos la tripa, subimos en telecabina a la cima de la montaña e la zona, donde también han creado una estación de esquí llamada Ylläs Sky Resort. Si en la cima de la estación de esquí de Saariselkä hacía frío, aquí hacía el doble, así que id preparados. Eso sí, las vistas son preciosas y hay muchísimo tráfico de gente esquiando que le da mucha vida a la zona. Si lo preferís, también podéis esperaros y desayunar en la cafetería de la cima en vez de en el lugar anterior. Como imprescindible, no podéis dejar de acercaros al columpio que hay en uno de los extremos de la cima y aprovechar para haceros allí una foto con el nombre del pico de montaña, es un recuerdo muy bonito.

Pero el colofón final del viaje llegaría ya por la tarde noche, cuando visitamos nuestra última sauna del viaje llamada Arctic Sauna World., en Jerisjärvi. Diríamos que fue nuestra favorita porque es muy completa, albergando en su interior hasta 4 saunas de diferentes tipos: la sauna de humo tradicional, la sauna de agua donde hay mucha humedad y la sauna más típica finlandesa. Por último, está la sauna llamada «Aurora Boreal», ya que tiene un techo de cristal y se pueden ver las luces del norte desde ella, pero a veces la reservan a grupos y no se puede utilizar (como fue nuestro caso). Además de esta experiencia, de nuevo, tuvimos la oportunidad de ver northern lights al salir de la sauna, una despedida inmejorable que pondría punto y a parte a nuestra visita por el país.
Día 15: hasta luego, Finlandia
La parte final de nuestro viaje consistió en volver al aeropuerto de Rovaniemi en un viaje de dos horas en coche desde Ylläsjarvi. Una vez dejamos el coche en el aparcamiento y devolvimos las llaves a la empresa, nuestra segunda visita al país más feliz del mundo terminó… Al menos por ahora.
Espero que te haya sido útil esta guía y si tienes alguna duda o sugerencia, te invitamos a dejarla en comentarios para que podamos leerla y responderte lo antes posible. ¡Hasta la próxima!
